SEM y SEO ¿Qué es?
En el mundo de internet es importante tener buenas estrategias de contenido para lograr atraer a los usuarios. El posicionamiento SEO y SEM son dos conceptos que pueden parecer similares, pero tienen sus diferencias cuando se tratan a profundidad.
Estas dos son técnicas son usadas en el marketing digital con el propósito de posicionar una página web en los primeros resultados de consulta en los motores de búsqueda como Google, AOL, Yahoo!, Bing, etc.
Para conocer la diferencia entre ambos conceptos primero se debe conocer la definición de cada uno, porque suelen confundirse por las personas que no tienen conocimientos sobre las estrategias digitales:
¿Qué es SEO?
El posicionamiento SEO (Search Engine Optimization) se conoce como un conjunto de técnicas empleadas para mejorar el ranking de búsqueda de una página web de manera orgánica. Este se lograr a través de la optimización de contenido, palabras claves y otros factores.
¿Qué es SEM?
El posicionamiento SEM (Search Engine Marketing) emplea un conjunto de tácticas basadas en campañas de publicidad para generar mayor visualización en una plataforma web. El SEM es una clase de posicionamiento pago en el cual los anunciantes pagan cada vez que el usuario hace clic sobre el anuncio.
¿Cuál es la diferencia de SEO y SEM?
La diferencia más marcada entre ambos conceptos obedece a la inversión que requiere cada estrategia. En el SEO natural u orgánico no es necesario invertir un porcentaje de las ganancias, mientras que el SEM requiere de un “pago por clic” cada vez que los usuarios visitan la página web debido a los anuncios.
Otra diferencia se encuentra en la temporalidad de cada uno: El SEM lograr posicionar una web a corto y mediano plazo, en tanto el SEO supone resultados a largo plazo. También se encuentra discrepancia en la calidad del contenido.
SEO y SEM: ¿Qué estrategia es mejor?
Como anteriormente se mencionó la diferencia entre un término y otro, una de las preguntas que pueden surgir es sobre cuál estrategia es mejor para una marca o empresa. Existen una gran cantidad de razones para inclinarse por una u otra estrategia, pues ambas tienen importancia en el marketing.
El SEO es una estrategia que permite implementar unas buenas bases para posteriormente realizar estrategias ligadas con el SEM, principalmente porque tener un contenido optimizado para los usuarios es de gran utilidad. Si no existe una optimización del contenido dentro de una página web, es muy probable que al implementar estrategias SEM fracasen y no se consiga obtener la visibilidad deseada.
Las estrategias de posicionamiento orgánico SEO tienen un menor costo para las marcas y a largo plazo generan una credibilidad en la búsqueda en internet. Estas clases de estrategias se deben mantener con la creación de contenido de calidad y apoyo de las redes sociales.
El enfoque SEM es útil cuando una empresa lanza al mercado una nueva marca y tiene la necesidad de obtener visibilidad en menor tiempo. Las campañas de PPC (pago por click) son ideales para generar visibilidad de forma inmediata en los motores de búsqueda. Pero es necesario tener en cuenta que las campañas de pago por click no garantizan el éxito, pues la creación de contenido de calidad es esencial para captar el interés de los usuarios y convertirlos en clientes potenciales.
Para conocer cuál estrategia es mejor para o no para una empresa es importante evaluar cuáles son sus necesidades específicas, si lo que se busca es obtener resultados en poco tiempo lo mejor es el SEM y, si por el contrario, el objetivo es posicionarse de forma natural y a largo plazo en los buscadores la mejor estrategia SEO.
SEO y SEM: ¿Cómo y por dónde empezar una estrategia?
En todo estrategia de marketing es necesario cómo y por donde empezar de comenzar a implementarla, pues de la planeación y organización depende que este tipo de tácticas tengan éxito en el posicionamiento de una plataforma web en los buscadores. Es necesario siempre tener en cuenta:
- Es importante antes de cualquier cosa, definir cuales son los objetivos de la estrategia. Para ello es necesario preguntarse: ¿Qué se quiere lograr? Algunos de los objetivos más comunes suelen ser generar ventas, atraer tráfico de usuarios o conseguir suscriptores.
- Identifica cuales son las condiciones y recursos de la marca para lograr estos objetivos. ¿Cuál es el presupuesto? ¿En qué tiempo se quieren lograr los objetivos? Cuando las marcas no tienen un presupuesto ni un tiempo específico pueden implementar estrategias SEO, mientras que las empresas con un presupuesto amplio para publicidad pueden optar por generar estrategias SEM.
- Como último punto es necesario definir qué tipo de contenido se quiere generar, ¿Se quiere promocionar o vender un producto? ¿se busca posicionar una página?
Cuando se define el tipo de contenido es posible crear artículos de interés para los usuarios, lo cual genera posicionamiento y ayuda a conseguir los objetivos.
